No confundir con los Seductores 2010, una película de humor que no tiene nada que ver.
Divertida comedia de enredos, un poco típica con los clásicos gags de humor que siempre funcionan. Pero merece la pena ir a verla. Alguna que otra risa está garantizada en el film.
El tema no es muy original, ya ha habido varias películas que han sacado el tema de los "rompeparejas"
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